BRASIL. – El famoso jugador Kaká se pronunció poco después de la
declaración del periodista Juca Kfouri que no lo perdona debido a una
controversia que los involucró a ambos en la Copa Mundial de 2010. La
afirmación del periodista fue publicada por UOL Esporte.
“¡Querido, Kfouri, yo te perdono por todos los ataques
personales que me hiciste! ¡Jesús te ama y yo también!”, escribió Kaká en su
perfil de Twitter.
En el Mundial de 2010, el periodista escribió una columna que
indica que Kaká tenía una lesión en el pubis y que podía acortar su carrera si
seguía actuando en sacrificio por Brasil.
En el momento de la declaración Juca molestó al jugador. Durante
la Copa del Mundo, el jugador interrumpió la pregunta de un reportero de ESPN,
André Kfouri, hijo de Juca, para responder a la columna.
“La artillería de él se volvió contra mí. Yo quería aprovechar
la pregunta para responder a las críticas que él viene haciendo y eso me deja
triste que su problema conmigo no es profesional, sino debido a que no acepta
mi religión. Porque yo soy una persona que sigue a Jesucristo. Lo respeto como
un ateo, y me gustaría que me respetara como [seguidor de] Jesucristo, como
alguien que profesa la fe en Jesucristo.
No sólo a mí,
sino a todos los millones de brasileños que creen en Jesucristo”, dijo Kaká en
2010.
Kfouri
respondió con prontitud en su blog desafiando a Kaká a que mostrara dónde lo
había ofendido. En una entrevista con Torcedores.com, el periodista fue más
allá: “Estoy esperando a que él muestre. Sólo podría haber sido porque yo
siempre critico el marketing religioso. El Tico no explicó al Teco que tal
crítica no es personal, es conceptual”.
Kaká, estará
seis semanas de baja. El jugador estrella de Orlando City se lesionó en el
partido inaugural en el nuevo estadio de los Lions y recurrió a una cita de la
Biblia para superar la baja.
Así que el
futbolista colgó a las pocas horas de retirarse del campo una fotografía con
una cita bíblica en su cuenta de Instagram: “Pero esto no es motivo de
vergüenza, porque sé a quién he creído, y estoy convencido de que es capaz de
guardar lo que le he confiado hasta ese día”, 2 Timoteo 1: 12.
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